Casi dos años después de su lanzamiento en PC llega a las consolas de sobremesa Candle: The Power of the Flame para dejar huella y recordarnos porqué ha sido uno de los títulos nacionales más aclamados de los últimos años.
Obra surgida como la ópera prima de esta empresa nacida en CEEIARAGON en Teruel, Teku Studios, la historia del estudio de José Antonio Gutiérrez y Miguel Vallés podría ser la de muchas start-ups, videojuegos al margen. Una buena amistad, una idea y una pasión comun, en este caso los videojuegos. Empezando desde cero en los ratos libres que la facultad les permitía hasta llevar el proyecto a Kickstarter, donde sobrepasaron los 40.000USD que necesitaban en un origen, llegando hasta algo más de 52.000USD. La financiación es clave para cualquier empresa y estos fondos han sido parte importante en el desarrollo final de Candle, a pesar de los retrasos sufridos hasta su lanzamiento en 2016.
No ha sido un camino fácil para Teku Studios, pero el resultado bien valió la pena y Candle cosechó, tras su lanzamiento, una buena acogida por parte de la comunidad de PC.
Candle nos permite tener acceso a un apartado artístico tan característico, virgen e impoluto. José Antonio Gutierrez inició como único hombre de a bordo el diseño de Teku y de todo el universo que rodearía a Candle. El resultado fueron una serie de bocetos en acuarela que posteriormente serían la base para llevar ese arte a la pantalla. Podrá gustar más o gustar menos, pero lo innegable es el cuidado depositado en cada personaje, en cada escenario, en resumen, en cada rincón de Candle, convirtiendo al juego en un espectáculo visual constante. No hablamos de la belleza ultra realista 4K de músculo hormonado, sino de esa belleza sutil que no envejece, que supera el paso del tiempo y las generaciones dejando huella y haciendo la obra reconocible hoy, mañana y siempre. Un universo repleto de naturaleza pero decadente, en busca de la vida pero ante la última oportunidad de garantizarla. Candle es un constante pasodoble entre la vida y la muerte,.
Y su diseño artístico no sería tan memorable si no contase con un apartado sonoro al mismo altísimo nivel. Mención especial a Pepe Mediavilla como narrador que nos acompañará durante toda la aventura en la piel de Yaqa. Pepe fue una de las voces más conocidas del panorama de doblaje nacional. Su voz os resultará familiar desde el primer momento al haber doblado a personajes tan míticos como Gandalf o por ser la voz de Morgan Freeman. Su nivel como narrador en la obra de Teku Studios está a la altura de una vida entera dedicada a su profesión por lo que en Candle nos sumerge con notable satisfacción en esos impases entre los diferentes niveles. Candle está disponible tanto en español como en inglés.
Tras consumir esos primeros momentos en los que Candle nos cautivará por su cuidado apartado artístico, se abre ante nosotros su gameplay con todo su potencial. Partimos ubicando Candle dentro del género de las aventuras gráficas. Con una influencia clara de esas mágicas aventuras peceras de principios de los 90, Candle tiene una clara influencia de obras como Oddworld, Flashback o estudios como LucasArts o Playdead.
Los usuarios de consolas han de sentirse muy afortunados de poder gozar al fin de la obra de Teku Studios. Obra que aúna lo mejor de las aventuras gráficas clásicas de los noventa con aventuras más de acción y toques más contemporáneos de estudios como Playdead o Amanita Design. Una auténtica joya de las que no abundan y en la que perderse en estos días de verano.